Marca Skatalites

Todavía resuena el eco del final de las fiestas de San Isidro que tuvimos el pasado domingo 15 mayo en Madrid en Las Vistillas a cargo de The Skatalites. Fue algo ciertamente insólito viniendo de un ayuntamiento tan poco entregado a este tipo de excentricidades culturales. Aunque hablando de Soul por ejemplo -y abriendo paréntesis- ya tuvimos cierto precedente las pasadas Navidades los que pudimos disfrutar con Shirley Davis & The Silverbacks en el auditorio de Conde Duque a un precio realmente popular. Esto no deja de ser paradójico en cierto modo, sin entrar en valoraciones políticas. Para quién no lo sepa, la artista británica de origen jamaicano es considerada actualmente la nueva diva del Soul europeo y -junto a la banda que la acompaña- ofrece un espectáculo solvente, íntimo y lleno de emoción, que pudimos disfrutar unos cuantos despistaos que andábamos por la ciudad sedientos de buena música en directo esos días. Y encima tenemos el privilegio de tenerla de vecina en Madrid, no se puede pedir más.

Pero volviendo a San Isidro, The Skatalites irrumpieron en el final de las fiestas procedentes de una gira europea cargada de pequeños clubs abarrotados, algo que también ocurrió en los Jardines de las Vistillas donde no cabía un alfiler. Se trata de un recinto donde es díficil ver bien el espectáculo si no te has adelantado varias horas para tomar posiciones, pues hay arbolado y otros elementos urbanos que lo impiden (está ubicado junto a las laderas de lo que se llamaba el antiguo cerro del campillo de las Vistillas y las caídas etílicas por la pendiente durante las fiestas son ya todo un clásico) Sin embargo, tanto el sonido como el montaje estuvieron al nivel que corresponde a unas fiestas de Madrid, compensando la escasa visibilidad.

El público, que era heterogéneo y más o menos ajeno a la música jamaicana como corresponde al final de unas fiestas patronales, estuvo absolutamente entregado al repertorio clásico de esta formación fundada en Jamaica entorno a 1960. Y se corearon vivamente a base de lo, lo, lo futbolístico piezas como Latin Goes SkaGuns Of Navarone, algo muy español por otra parte. Me atrevería a decir que el público estuvo incluso más entregado que los propios artistas -o esa sensación me dió- a juzgar por el despiste generalizado sobre el escenario tras el primer -y último-  bis de la noche y la salida algo precipitada con la que terminaron la actuación, la cual -dado lo histórico e insólito de la cita- tal vez hubiese merecido otro final más épico.

The Skatalites siempre estuvieron rodeados de una atmósfera de leyenda por ser pioneros en su estilo, aunque no fueron los únicos. Esa leyenda crece y se consolida muy especialmente a partir de su reencuentro en la década de los 80, tras el paréntesis que siguió al trágico suceso protagonizado por su trombonista Don Drummond, que fue encarcelado en 1965 por asesinato y murió recluido en 1969 en circunstancias no demasiado claras. En 1983 inmortalizaron su reencuentro con la grabación en vivo de Streching Out en un club de Kingston, siendo sin duda uno de los trabajos más relevantes de toda su amplia discografía. Una década más tarde vendría Hi Bop Ska (1994) album que les reportó la primera de las dos nominaciones para los Grammy que cosecharon en esa época.

En la década de los 90 desarrollaron una gran actividad actuando en todo tipo de festivales y salas de USA y Europa, llegando por primera vez a España entre otros lugares. Tras unos pocos años dorados, el proyecto comenzó a dar sus primeras señales de fatiga a finales de esa década. El año 1998 fue fatídico para esta formación jamaicana por la pérdida de Roland Alphonso y Tommy McCook con apenas unos meses de diferencia. El grupo no tuvo más remedio que reinventarse y favorecer el relevo generacional.

Tocando junto con los nombres icónicos de Doreen Shaffer, Lloyd  Brevette, Lloyd Knibbs Lester Sterling la banda fue dando entrada a otros talentos jamaicanos más jóvenes como Val Douglas, Vin Gordon, Sparrow Thompson o Kevin Batchelor y también músicos norteamericanos como Ken Steward o Nathan Breedlove entre otros.

Y así hasta hoy, donde prácticamente no queda ningún miembro original en activo y The Skatalites se han convertido en una marca. Una marca sustentada eso sí por grandes músicos, cuya difícil misión será mantener vivo el espíritu original de un repertorio consagrado y transmitir a las generaciones más jóvenes el valor de la música jamaicana. En una época de tanta banalidad como la actual ese es un valor a conservar, aunque algunos no podamos evitar añorar terriblemente a sus fundadores, especialmente los que tuvimos la fortuna de experimentar en vivo su energía irrepetible. Que sigan vivas las leyendas y que los políticos lo vean.

WESTERN STANDARD TIME SKA ORCHESTRA – Tombstone (2021)

Como ya adelantamos en el pasado EP44 mañana día 18 de noviembre sale a la luz TOMBSTONE el tercer álbum de esta gran orquesta fundada por Eitan Avineri y Benny Golbin en Los Ángeles hace 10 años. Western Standard Time Ska Orchestra (WST) nació como un proyecto ideado con la intención de reunir en el estudio a los mejores músicos de ska y jazz de la Costa Oeste norteamericana, una de las áreas con mayor influencia creativa global en el revival ska y reggae jamaicano desde finales de los años 80.

El grupo nació como big band de all-stars inspirada en los temas clásicos de The Skatalites de fuerte componente jazzístico, con influencias de Duke Ellington entre otros clásicos del género. La primera entrega de esta serie fue Big Band Tribute To The Skatalites Vol. 1 (2012); un álbum con 10 temas que contó con la presencia de Joey Altruda al contrabajo, Korey Kingston a la batería, Brian Dixon el guitarrista de Aggrolites, Brian Wallace (ex-Sublime, Mobtown) y Fredo Ortiz como percusionista, por citar algunos de los grandes nombres que participaron en la grabación.

Tres años más tarde grabarían Big Band Tribute To The Skatalites Vol. 2 (2015) incorporando al proyecto las voces de Greg Lee, Alex Desert (Hepcat) y Vic Ruggiero (The Slackers) además de otras brillantes colaboraciones como la de Kincaid Smith (Hepcat) en la trompeta o el cantante de Fishbone, completando un total de 39 artistas colaborando en la grabación. El resultado fue un sonido claramente diferenciador y esplendoroso, reforzado notablemente por la presencia de grandes talentos en las diferentes secciones de viento y en la percusión, actuando como un sólo instrumento perfectamente engrasado por una brillante orquestación y evocando los tiempos de las grandes orquestas de los 50 con un toque netamente jamaicano.

El año 2016 supuso la culminación de un éxito creciente e internacional y también un giro trágico en la trayectoria de WST, con la triste pérdida de Benny Golbin en un lamentable accidente de tráfico provocado por un conductor que hacía carreras ilegales. Este fue un acontecimiento que hizo tambalear la continuidad del proyecto, debido a que Golbin era el principal arreglista de la orquesta en ese momento y el álbum está dedicado a la memoria de este músico y profesor de Los Ángeles, cofundador del proyecto junto a Eitan Avineri.

Por fortuna, consiguieron salvar este revés del destino y el proyecto ha tenido continuidad en los últimos años, con diferentes lanzamientos en formato single de 7″ (Tunnel Vision, 2020 / Araña Ska, 2021 / SkaBa, 2021 / Malcolm X, 2021) a los cuales ha seguido este nuevo álbum con 10 temas originales, dos de los cuales están cantados por voces invitadas como la de Jesse Wagner (The Aggrolites) y Chris Murray.

El disco se abre con Monolith, que es la locomotora de vapor que va en cabeza de este tren orquestal con cierta inspiración en el mundo del western, aunque mucho menor de lo que podría deducirse del artwork y el título elegido por el grupo californiano para este tercer álbum de estudio: Tombstone. No esperen un disco en la línea del spaghetti-western-ska que se escucha en los últimos tiempos (Tempranos, Le Grand Miércoles, etc.) porque la cosa no va de eso, por tentadora que pueda resultar la asociación. Aunque existe cierta ambientación con el western, la propuesta de WST es algo más sutil y no incluye melódicas o steels guitars, ni guiños abiertos a los clásicos de género como Morricone o Bacalov.

Western Standard Time Ska Orchestra

A este prólogo sonoro y contundente, le siguen temas destacables como Natulli, que coquetea con la música de influencia árabe y española, rozando casi el pasodoble en una pieza orquestada con maestría y aderezada por solos de trombón y trompeta infinitos. También Habit of Happiness que se desliza en la época de Capitol Records, una canción escrita por Eitan Avineri y Jesse Wagner con la voz de éste último y en un registro que no habíamos visto antes, que supone una incursión en los días dorados de Frank Sinatra pero con un toque de swing jamaicano algo más rudo y sabroso. WST ha editado videoclip de este tema con Marshall Watson y Alexandria Lee Bevilacqua como actores/bailarines:

El álbum prosigue con piezas originales como Tombstoneque da título al proyecto- con una melodía de cierto aire épico y más próximo al leitmotiv que ambienta al disco, que presuponemos en el contexto del tiroteo de OK Corral ocurrido en Tombstone (Arizona) en 1881. Le sigue Nostalgic Ska en un estilo netamente californiano de hacer ska, muy próximo al compás de grupos como Hepcat y solos hermosamente encajados.

Grizzly y Grey Ghost nos devuelven a esa ambientación árida y cinematográfica de Arizona en el siglo XIX, con las disputas entre forajidos y funcionarios de la ley detrás de un corral de ganado en el pueblo de Tombstone. La ley de Wyatt Earp, Morgan Earp, Virgil Earp y Doc Holliday contra los vaqueros Billy Claiborne, Frank McLaury, Tom McLaury, Billy Clanton y Ike Clanton. 30 disparos en 30 segundos -de aquellos polvos, estos lodos- que recreó con algunos altibajos George P. Cosmatos en su película de 1993.

Moment es el segundo corte cantado del álbum, escrito e interpretado con soltura por Chris Murray, los arreglos -a título póstumo- de Benny Golbin y con un aire más jamaicano y ‘skatalite’ que el primero. Le sigue el tema reggae orquestado Fortifiedcon bellas melodías al trombón bajo y mucha profundidad de graves, que contrasta con los arreglos de vientos altos.

Sunrise From The East es el epílogo de toques orientales con aroma de western que cierra el álbum, donde destaca la energía en la percusión y una melodía engalanada una vez más por el trombón solista y el contraste con una sección de viento espectacular.

TOMBSTONE se estrena mañana 18 de Noviembre en soporte físico y digital en las principales plataformas.

DISCOGRAFÍA

Álbumes

Sencillos y EPs

Supernova o el arte del encuentro

Hepcat durante su actuación del pasado día 19 de Septiembre en Supernova

La pasada edición del Festival Internacional de Ska Supernova 2021, celebrado los pasados días 17, 18 y 19 de Septiembre en Hamptom (Virginia, USA) ya se adivinaba intensa desde varias semanas antes. A ello contribuyeron tanto las especiales circunstancias de su celebración -una de las primeras citas musicales del género tras la pandemia- como el nivel de los artistas que habían confirmado su presencia en el cartel, creando grandes expectativas en las redes sociales.

El eco de Supernova aún permanece una semana después de su celebración, lo que confirma que esas expectativas estaban a la altura de lo ocurrido en Fort Monroe durante ese fin de semana. Días de ska y rosas en sus diferentes facetas, saltando de lo más clásico a lo más innovador con una precisión suiza, como si ambos escenarios tuviesen un conmutador automático. En un sentido evocador, Supernova ha sido este año una auténtica inmersión en la década de los 90 del ska norteamericano

Flymo & The Vershons

con grupos veteranos del género como The Toasters, Bim Skala Bim, Mephiskapheles, The Slackers, Hepcat o Eastern Standard Time. Maestros que tocaron y se mezclaron con bandas más jóvenes, contemporáneas y con capacidad para sorprender. Tal fue el caso de Half Past Two, Sammy Kay & The Fast Four, Flymo & The Vershons, The Loving Paupers, Catbite o Adhesivo (venidos desde El Salvador y una de las pocas presencias internacionales en el supuesto cartel global) entre otras. El resultado fue un auténtico banquete de sensaciones para los amantes de este género. Un festín que apenas daba tiempo a digerir en tiempo real por el riguroso cumplimiento del programa, lo que es de agradecer a la organización de un festival tan complejo.

Rude Girl Revue

También hubo espacio para alguna skavaganza, como fue la brillante actuación de Rude Girl Revue en la primera noche de festival. Este grupo, surgido de una unión temporal de artistas femeninas por el ska, hizo vibrar a los asistentes con un show cargado de ritmo, colorido y versiones de los clásicos de todos los tiempos entre las que no faltaron guiños incluso para Aretha Franklin. Esta actuación con cierto aroma a cabaret-ska, fue una de las más comentadas por su energía y carácter reivindicativo del papel femenino en la música. La integraban nombres propios como Marcia Leach (Bowcat), Kathryn Lawrence (Bowcat), Tara Hahn (Half Past Two), Kelly Di Fillipo (The Loving Paupers) Brittanny Luna (Catbite) o Kristin Forbes (aka Lady Hatchet, The Scotch Bonnets) entre otras artistas que han aportado su contribución al proyecto.

Supernova es un festival que arrancó su andadura en 2014 y desde entonces ha ido claramente de menos a más, convirtiéndose en una de las citas imprescindibles del año en USA como punto de encuentro del sector discográfico relacionado con el ska en ese país. Con el espíritu de unir artistas de todas las eras del ska y sin perder la mirada sobre sus orígenes, por él han desfilado artistas como Derrick Morgan o Doreen Shaffer, compartiendo escenario con bandas como The Aggrolites, The Suicide Machines o The Skints a lo largo de los años.

En la edición de este año, su carácter modesto se ha hecho notar en algunos detalles, como la disposición y el tamaño de los dos escenarios -el segundo de ellos era prácticamente una carpa de boda- o una afluencia de público algo discreta que, no obstante, fue suficiente para crear un ambiente cálido durante todo el fin de semana. La edición anterior (2020) fue completamente virtual por la pandemia (Quarantine Edition) y eso se ha notado en el incremento de medios tecnológicos para difundir el festival por Internet. La retransmisión por streaming tuvo algunos altibajos de imagen y sonido -especialmente el primer día- y la realización fue algo accidentada en algunos momentos, lo que resulta comprensible dada la complejidad técnica de cubrir un evento de ese tipo. Pero hay que señalar que el montaje en su conjunto mereció un notable alto por la calidad de imagen y sonido que llegaba por Internet, nota que se intuye más alta en la percepción del público presente a pie de escenario, especialmente en el principal.

Destacaron los dos momentos más cálidos y esperados del fin de semana: la actuación de Slackers y The Skatalites en la noche del sábado y el cierre de festival por todo alto a cargo de Hepcat, en la jornada del domingo. Ambas noches dejaron un magnífico sabor de boca. También brillaron con luz propia -y por el sol matinal de una hora intempestiva- Eastern Standard Time, la banda de Washington DC que abrió jornada en la mañana del domingo con una presencia y autoridad indiscutibles, pese al inexplicable horario de su actuación.

Los miembros de Eastern Standard Time (Washington DC) anuncian la llegada a Supernova a sus fans

En resumen, una experiencia inolvidable que nos deja las pilas cargadas para afrontar un año de encuentros y mucha música para disfrutar en esta comunidad global del ska. Ojalá más festivales de este tipo en más lugares, especialmente en España ¡Hasta la próxima explosión estelar Supernova en 2022!

Una ‘carta de amor’ coral y meditada

 

The Gramophone Allstars Big Band

 

El pasado viernes 14 de mayo se presentó LOVE LETTER, el último trabajo de estudio de THE GRAMOPHONE ALLSTARS BIG BAND repitiendo experiencia con el sello Bankrrober (Barcelona) que les ha acompañado desde «JAZZMAICA» (2014). LOVE LETTER es un EP en formato vinilo de 10″ que incluye 4 temas originales escritos por la banda y 1 cover abriendo la Cara B, convertido en adelanto en formato single de «Old Rocking Chair»: un tema del cantante Jackie Opel y Coxsone Dodd publicado en 1964 tanto por Coxsone Dodd Records como por Studio One  y arropado en lo musical por The Skatalites.

El disco se inicia de manera soberbia con Marina Ginestà, una obra firmada por  Lluc Casares (Saxofonista y compositor, 1990) que entregado a la música desde muy pequeño,  creció rodeado por los sonidos del saxo de Sonny Stitt y la trompeta de Louis Armstrong a la vez que interiorizaba los ritmos de los Afro-Cuban All-Stars o Earth Wind and Fire. Su padre, Pau Casares, héroe local de la escena catalana, fue su primer maestro y mentor. Lluc se formó en Nueva York bajo la dirección de Ben Wolfe y Wynton Marsalis. A lo largo de su carrera Lluc ha tocado con músicos como Dr. John, Nicholas Payton, Frank Wess, Phil Woods, Lee Konitz, Jon Faddis, Jesse Davis, Arturo Sandoval, Wendell Brunious, Grant Stewart, Ben Van Gelder o Benjamin Herman.

Le sigue Supersonic, una composición de Pep Tarradas en clave rocksteady  orquestal que a veces se torna casi cinematográfica, con elaborados arreglos y una ligereza encantadora aportada por el sonido de las flautas.

One For Lola es el tema firmado por el director musical de The Gramophone Allstars, Genís Bou, una sabia incursión en lo más profundo de la tradición ska jamaicana de The Skatalites. Una maravillosa vuelta al origen de las melodías elaboradas por la mítica banda de Kingston, marcada por el bajo de Tito Bonacera  que encarna perfectamente el espítitu de Lloyd Brevette en la base rítmica característica del ska original.

El disco se cierra con Storm On Silicon, todo un guiño a la etapa pre-ska del rythm & blues norteamericano de los años 50 resuelta con maestría por Pere Miró y dando el toque canalla al album.

Una edición muy cuidada dirigida a coleccionistas -con ejemplares numerados a mano- y también para seguidores de esta big band que lleva más de una década alegrando el panorama musical europeo. Desde aquí deseamos nuevos éxitos y energía renovada, en esta nueva etapa que se abre en la trayectoria de este magnífico grupo catalán.

FORMACIÓN ACTUAL

Lluc Casares – Saxo alto
Francesc Vidal – Saxo alto
Genís Bou – Saxo tenor / Flauta
Pau Vidal – Saxo tenor / Flauta
Pere Miró – Saxo barítono
Pep Garau – Trompeta
Pol Omedes – Trompeta
Oriol Vallès – Trompeta
Pep Terradas – Trompeta
Albert Costa – Trombón
Sidru Palmada – Trombón
Alba Pujals – Trombón
Adrià Plana – Guitarra
Eloi Escudé – Piano
Tito Bonacera – Bajo
Xoan Sánchez – Percusión
Aleix Bou – Batería
Kathy Sey – Voz
Yolanda Sey – Voz

DISCOGRAFÍA

JUST DELIGHTIN’ (2008) LP
SIMBIOSI (2009) LP
LEVINTANT A LA DERIVA (2011) LP
JAZZMAICA (2014) LP
MARACA SOUL (2017) LP
the reel influence (2019) 10º Aniversario, EP
the gramophone allstars meets robert sanchez: let’s get int on, single (2020)
LOVE LETTER (2021), EP

BAND BIO (tomado de TGASBB Bio)

JUST DELIGTHIN’ (2008)

El debut del nuevo grupo fue en julio de 2008, coincidiendo con la aparición del primer álbum de la banda Just delightin’… (Silver Bullets / Brixton Records). Álbum que, de hecho, había sido grabado con los músicos de Delighters, de ahí el homenaje en el título del álbum. Una vez en el mercado, el álbum es bien recibido en los medios especializados y permite al grupo comenzar a actuar regularmente.

SIMBIOSI (2009)

En octubre de 2009 la banda grabó su segundo álbum, Simbiosi, que apareció en febrero de 2010 lanzado por el prestigioso sello madrileño Liquidator. El álbum supera todas las expectativas con una excelente recepción del público y la prensa. El grupo comienza a aparecer con frecuencia en medios especializados y, poco a poco, a los generalistas.

También vienen las primeras apariciones televisivas (TV3, BTV), prensa generalista (La Vanguardia, El Punt) o la desaparecida revista JAÇ. Además, el álbum es revisado en numerosos portales especializados en Europa y Sudamérica. Todo ello permite al grupo seguir creciendo y jugando por primera vez fuera de Cataluña, en ciudades como Madrid o Granada.

Festivales

Este ritmo emocionante se acelera a partir de 2010 con actuaciones en festivales tan importantes como BAM (Barcelona), Rototom Sunsplash (Benicàssim), Festival Internacional de Jazz de Girona o, ya en 2011, abriendo el concierto de James Hunter en el Black Music Festival. Al mismo tiempo, el grupo participa en el álbum tributo a la legendaria banda barcelonesa Skatalà con una versión de la legendaria «Pistoletes de l’Escala» y también graba el tema «After crying looks all clearer» de Paracetamol Music, del productor Jaume Pla (Mazoni).

Backing Band de Mr. T-Bone

En febrero de 2011, The Gramophone Allstars tocó como banda de acompañamiento en la visita a Barcelona del trombonista italiano Mr. T-Bone en una gira en la que el músico italiano, uno de los músicos más influyentes en la escena internacional jamaicana en los últimos años, tocó bandas locales en las diferentes ciudades por donde pasó. Un concierto memorable con un agotado en la sala Marula.

LEVINTANT A LA DERIVA (2011)

Después de la gira, el grupo grabó el tercer álbum, Levitant a la deriva, que apareció en septiembre de 2011 bajo el sello Liquidator y esta vez en dos formatos: CD y vinilo. La gira de presentación llevará a la banda a ciudades como Barcelona (¡agotada en el Auditorio!), Madrid (Sirocco), Zaragoza (Arena Rock), Girona (Auditorio), Lleida (Café del Teatre), Terrassa (Faktoria d’Arts), Manresa (Stroika), L’Hospitalet (Salamandra) o Mataró (Clap), entre muchas otras. Además, el grupo es seleccionado por el programa AIE-Artistas en Ruta y realiza una gira de cuatro fechas por Galicia, culminando con un exitoso concierto en la legendaria Sala La Iguana de Vigo.

La familia crece: The Gramophone Allstars se convierte en Big Band

Un año más tarde, a mediados de 2013, comenzamos a preparar el que será el trabajo más ambicioso de la banda y un proyecto que Genís Bou tuvo en mente durante años: grabar un álbum de música jamaicano en formato big band. Después de un año de trabajo muy intenso, se celebran dos preestrenos en el Festival de Jazz de Banyoles y el Verano jazzístico de Igualada y entraron en el estudio en julio de 2014.

JAZZMAICA (2014)

El inesperado éxito de Jazzmaica

Jazzmaica marca un antes y un después en la trayectoria del grupo, que pasa de ser un octeto a una big band. El nuevo formato permite la entrada de nuevos miembros a la banda, muchos de ellos de reconocida trayectoria en las escenas de jazz y ska de Cataluña a pesar de su juventud. El álbum fue lanzado al mercado en septiembre de 2014, lanzado esta vez en el sello Bankrobber.

Gira de presentación de Jazzmaica y lanzamiento del álbum en Japón!

La gira de presentación de Jazzmaica abre muchos frentes a la nueva big band, tocando en los principales festivales de las escenas catalana y española: Cruïlla Barcelona, Aphònica, FIMPT, Connexions, Black Music Festival, Festivern… En el campo del jazz, el álbum fue presentado en los prestigiosos festivales de jazz de Terrassa, Vic y La Garriga y el grupo también llevó a cabo una residencia de un mes en la legendaria sala Jamboree de Barcelona. Además, el nuevo formato ha atraído la atención de destacados músicos como los saxofonistas Benjamin Herman y Perico Sambeat, que se han unido a la banda en actuaciones ocasionales. En junio de 2015, el álbum Jazzmaica fue lanzado en Japón bajo el sello P-Vine, abriendo una nueva puerta en la expansión internacional de The Gramophone Allstars Big Band.

Después de terminar 2015 con un pleno absoluto en la sala Apolo de Barcelona, The Gramophone Allstars Big Band se enfrentó a nuevos desafíos en 2016. Por un lado, la extensión de la banda con la incorporación como coros de Kathy Sey y Yolanda Sey. Y además, nuevas colaboraciones con artistas locales (el coro Gospelsons dentro del Festival Músiques Tranquiles) o internacionales: dentro del Black Music Festival presentan una nueva producción tributo a Amy Winehouse con su corista original, Zalon. La gira Jazzmaica cerraría en septiembre de 2016 con un concierto en la plaza principal de Vic dentro del Mercat de la Música Viva de Vic, culminando con una gira de 65 conciertos.

MARACA SOUL (2017)

Durante la primera mitad de 2017 la banda está preparando el que será su quinto álbum de estudio, que se graba de nuevo en un mes de julio en los mismos estudios donde ya grabaron Jazzmaica: Estudis Ground (Cornellà de Terri). El nuevo álbum, titulado Maraca Soul, sale a la venta el 29 de septiembre con el sello Bankrobber. Para el álbum el grupo tiene el placer de tener un colaborador de lujo: el saxofonista holandés Benjamin Herman.

El nuevo tour comienza con mucha intensidad. Tras llenar el Auditorio del Ateneu de Banyoles en el pre-estreno y actuar en el Mercat de la Música Viva de Vic llenando la carpa de Atlàntida, el grupo presenta el disco con éxito en la Sala Apolo ante las 1.000 personas que asisten a un evento en Barcelona. Además, durante el otoño el ritmo de conciertos no se detiene: agotado en el Festival Temporada Alta, participación en festivales como Festivern (Tavernes de la Valldigna), Ponent Roots (Lleida), Esperanzah (El Prat) o Jazz&Beer (Cornellà de Llobregat) entre otros conciertos.

LOVE LETTER (2021)

Esta obra consiste en 4 composiciones originales escritas por miembros de la banda y una cover. La foto de portada (Elisabet Mateu) es un homenaje a otra foto: una imagen mítica de una de nuestras bandas de cabeza a quien dedicamos este trabajo.
El EP se publicó el 14 de mayo gracias a Bankrobber en formato vinilo de 10 ′′ y edición limitada de 300 copias numeradas a mano.